miércoles, 20 de junio de 2012


Se descubrió en el país una causa que mantiene vivos
a los tumores de melanoma y sarcoma de Kaposi 

Para lograr su terapéutica, jóvenes argentinos con investigadores de Harvard
desarrollan un arma creada por nuestro Premio Nobel César Milstein.
 
 

  En nuestras últimas comunicaciones informamos sobre los avances en inmunología del cáncer, de jóvenes argentinos – reconocidos internacionalmente – que dirige el Dr.Gabriel Rabinovich. Si no leíste esta información puedes hacerlo ahora.

  Nuestros científicos descubrieron la proteína Galectina 1 (G-1), que producen varios tumores para protegerse y escapar a nuestras defensas. Hoy nos referiremos a la acción de G-1 en el melanoma (el más grave cáncer de piel) y en el sarcoma de Kaposi (tumor del tejido conectivo en personas con bajas defensas, a menudo asociado con el SIDA).

  El joven Diego Croci, biólogo y doctor en química biológica, nos dice: “Hace 6 años que me esfuerzo en estudiar y comprender los mecanismos que permiten a la célula tumoral escapar de nuestras defensas, de nuestro sistema inmune. Finalmente logré darme cuenta por qué esto ocurre en elmelanoma y en el sarcoma de Kaposi: aquí, como en otros cánceres, laG-1 tiene un rol importante. Observé que esta proteína se ocupa de formarvasos sanguíneos para mantener al tumorbien alimentadobien nutrido. El estudio lo realizamos sobre ratones, en el caso del melanoma, y en tejido humano canceroso en el sarcoma de Kaposi.”

  “Este proceso de creación de nuevos vasos sanguíneos – agrega el Dr.Croci– se llamaneovascularización. Por él los tumores reciben nutrientes y oxígeno para vivir. Elsarcoma de Kaposi se muestra altamente vascularizado."


  El descubrimiento de la proteína G-1ya dijimos que despertó el interés de científicos de la Universidad de Harvard, dirigidos por la Dra.Margaret Shipp. Tras la firma de un Convenio de Invención Conjunta en 2011, los norteamericanos se sumaron a estas investigaciones y con ellos se está desarrollando un anticuerpomonoclonal (AMC) para bloquear la acción de G1 y así evitar la vascularización.

  Recordemos que el argentino César Milstein ganó el Premio Nobel de Medicina en 1984, por haber ideado los AMCs, también llamados la bala mágica o el misil anti-cáncer pues tienen la característica de destruir un blanco – en este caso la proteína G-1 – sin dañar tejido sano.

  Los jóvenes científicos que dirige el Dr.Rabinovich y los investigadores de Harvard desarrollaron un AMC que puede aplicarse en los experimentos con animales. Para utilizarlo en pacientes deberán ahora “humanizarlo”, a fin de que nuestro organismo no rechace al AMC como algo extraño. Los estudios avanzan en este importante objetivo terapéutico.

  César Milstein debió emigrar a Gran Bretaña por la falta de recursos. Los jóvenes científicos mencionados trabajan en el país, en el Instituto de Biología y Medicina Experimental que fundó el Premio Nobel argentino Bernardo Houssay, en Belgrano, pues desde hace 13 añosla Fundación SALES les brinda todo su apoyo gracias a miles de pequeños donantes y a la importante colaboración de dos familias argentinas muy generosas: Ferioli y Ostry.